CEAPA se
suma a la semana de lucha convocada por el Sindicato de Estudiantes para
convertirla en una actuación conjunta del alumnado y las familias y, entre
otras cosas, convoca a la huelga a los padres y madres para el jueves día 18 de
octubre.
CEAPA considera
que la gravísima situación actual demanda una respuesta contundente del
alumnado y sus familias. Estamos ante un ataque sin precedentes a los derechos
del alumnado y de las familias, con recortes salvajes en la educación española
que, en el contexto actual, se agravan por la coincidencia con otras medidas
igualmente inaceptables.
Hemos
arrancado un curso escolar que ha superado con creces los peores pronósticos y
ha llegado el momento de que el alumnado y las familias, además de seguir
realizando movilizaciones conjuntas con el resto de la Comunidad Educativa,
eleven su voz para decirle al Gobierno Central, y a los Autonómicos que siguen
su senda, que han llegado al punto de no retorno y que no estamos dispuestos a
tolerar ni una sola medida más.
El
alumnado y sus familias están soportando recortes en todas las partidas, que no
hacen otra cosa que castigar las ya maltrechas economías familiares, abocando
al abandono educativo a muchos alumnos por cuestiones económicas. Es
intolerable y debemos cambiar radicalmente las medidas que se están tomando.
Sobran
los motivos, pero queremos resaltar especialmente que el alumnado y las
familias nos movilizamos conjuntamente porque:
·
No
aceptamos un nuevo cambio de Ley educativa. La sociedad española está cansada
de que cada nuevo Gobierno se empeñe en modificar la legislación educativa,
máxime si, como ocurre ahora, se hace sin contar con los diferentes sectores
buscando cambiar el actual modelo social y satisfacer consignas ideológicas.
·
No
aceptamos que se nos mienta para justificar una reforma del sistema educativo
español tergiversando datos y haciendo juicios de valor que no están basados en
datos fiables y contrastados.
·
No
aceptamos que se desmantele la educación pública para beneficio exclusivo de la
iniciativa privada, desviando los fondos públicos para financiar entidades
privadas, muchas de dudosa legalidad, que incluso se atreven a vulnerar la
Constitución Española con la connivencia de quienes deberían cumplir y hacer
cumplir el marco legal vigente.
·
No
aceptamos que haya niños y niñas que pasen hambre en los centros educativos,
máxime teniendo en cuenta que ha contribuido a ello que determinados
responsables políticos hayan decidido retirar las ayudas a sus familias justo
cuando en tan sólo dos años la cifra de
pobreza infantil en España ha crecido un 10%, sumando 205.000 menores de 18
años que viven en hogares que están por debajo del umbral de la pobreza a los
más de dos millones que ya existían, incremento que es consecuencia del acoso y
derribo al que están sometidos los derechos de los ciudadanos españoles.
·
No
aceptamos que se eliminen todo tipo de ayudas al alumnado y las familias, se
incrementen las cuotas y las tasas, incluso creándolas donde no existían,
incumpliendo el mandato constitucional de la gratuidad de la enseñanza y el
derecho de acceso en igualdad de condiciones, llegando a ser habitual que los
niños no dispongan de los libros de texto y el material curricular necesario
para ejercer su derecho a la educación.
·
No
aceptamos que los irresponsables políticos que nos gobiernan sigan insultando
al profesorado que enseña al alumnado español, que goza del respaldo de las
familias españolas y del alumnado con el que conviven diariamente, en un ataque
sin precedentes a la figura del funcionario público y de los interinos, a los
que se trata en ambos casos como si fueran muñecos de feria, con el único
objetivo de poner la educación en manos de la empresa privada y, con ello, de
precarizar la profesión docente.
·
No
aceptamos que el Gobierno central, y los autonómicos que secundan sus
directrices con alegría, sigan despreciando al alumnado y sus familias, lo que
demuestran con sus actuaciones y con sus manifestaciones públicas. Se olvidan
de que son nuestros servidores y no nuestros dictadores.
En
definitiva, el alumnado y las familias decimos “hasta aquí hemos llegado”, y
exigimos:
·
El
cese fulminante del Ministro Wert y de todo su equipo.
·
La
retirada inmediata del inaceptable anteproyecto de reforma de la LOE.
·
La
paralización inmediata de todas las medidas de recorte y desmantelamiento de la
educación española.
·
Y
la apertura, con un nuevo equipo ministerial, de un proceso real de diálogo con
los diferentes sectores de la Comunidad Educativa para buscar, entre todos, el
consenso necesario para mejorar, de verdad, la educación española.
Y, por
tanto, convocamos a las familias a sumarse a la semana de lucha que ha sido
convocada por el Sindicato de Estudiantes, que se desarrollará entre los días
15 y 19 de octubre, implicándose en ella para que sean actuaciones conjuntas
del alumnado y de los padres y madres. (Se adjunta calendario de actuaciones.)
Hacemos
un llamamiento especial a las familias para que realicen el día 18 de octubre
una huelga de padres y madres, consistente en vaciar los centros educativos de
todo el país, no llevando a nuestros hijos e hijas a dichos centros para
defender sus derechos.
Así
mismo, os pedimos que facilitéis la posibilidad de que, solos o con vuestro
acompañamiento según las edades y maduración de vuestros hijos e hijas, puedan
estos participar de las manifestaciones de estudiantes que se celebrarán en la
mañana del día 17 y, todos juntos, hacerlo también en las que se realizarán en
la tarde del día 18. De igual forma, os pedimos que forméis parte de las Asambleas
que se convoquen y de los piquetes informativos que se realicen.
Ha
llegado el momento de que demos un mensaje claro sobre que las cosas han
llegado hasta donde nunca deberían haberlo hecho y que no estamos dispuestos a
que sigan por ese camino.
Madrid,
10 de octubre de 2012